agosto 08, 2005
Obras de González y Murillo en La Paz
Las consagradas artistas presentarán su arte en el Centro de Cultura Arte y Arquitectura Taipinquiri una original exposición bipersonal. La muestra se inaugurará el miércoles 10 de agosto de 2005, a horas 19:30.Las jóvenes artistas radican en Santa Cruz y están “en permanente ejercicio del arte boliviano contemporáneo”. La muestra cuenta con el apoyo de la Cervecería Nacional Boliviana, y se la podrá apreciar entre el 10 al 31 de agosto de 2005.
NATALIA GONZÁLEZ, ACLARA, EN RELACIÓN A SU PROPUESTA
"En esta oportunidad, exhibo una serie de pinturas de titulada Vida Cotidiana. La serie muestra, a modo de cerrojo a través del cual se mira, distintas situaciones en las que se descubre gente común, inmersa en sus afanes habituales: bailando, cantando, tomando, charlando, lustrando zapatos, vendiendo o durmiendo. En este mosaico de escenarios y personajes, que conforman la ciudad de Santa Cruz hoy en día, surgen encuentros entre naturaleza y modernidad, hombres y mujeres, día y noche, autos y carretas, motocicletas y palmeras, tiendas y carros ambulantes. Toda esta actividad se compone a partir de un dialogo del color que describe la atmósfera intensa y cálida de esta realidad tropical, y los comportamientos y particularidades de los personajes que la conforman".
MAGENTA MURILLO
Magenta Murillo pretende, en esta ocasión, “jugar y provocar en cada una sus pinturas, temas contemporáneos que se debaten entre lo banal, lo profano, lo divino, junto a imágenes del arte clásico, que incitan el análisis existencial, el cuestionamiento permanente de las imágenes sacras o profanas como reiteraciones visuales de verdades a mentiras, las más de las veces, en afanes meramente materiales. Así por ejemplo, lo físico como un icono exagerado de objeto usable, cambiable, ‘Adorno’, el ansia por la belleza física y el hedonismo a cualquier precio, que se traduce en la inversión exagerada de preocupación de la mujer por estar SIEMPRE BIEN ARREGLADITA”. Su muestra expone, por lo tanto, “la exageración de la vanalidad, en una carrera descontrolada por las apariencias, donde ya no son personas enteras sino tan solo pedazos de caras, boquitas, ojos, etc.”
